Han aparecido tendencias mundiales tales como sobre el cambio climático, la evolución de los patrones de consumo de alimentos, el bienestar animal o las expectativas de la sociedad por una producción animal más respetuosa del medio ambiente. Es necesario tener en cuenta estas tendencias a la luz de los progresos científicos y de las tecnologías de la información, así como de la creciente complejidad e interrelación de los sistemas.

Con la crisis de la COVID-19, estas expectativas sociales se han vuelto aún más fuertes, más urgentes y al mismo tiempo han aparecido otras preocupaciones en la lista de prioridades. Se trata principalmente de las cuestiones relacionadas con la vigilancia de los reservorios potenciales de agentes patógenos zoonóticos con un gran riesgo epidémico, en particular en la fauna silvestre.

De este modo:

• la OIE necesita alzar su voz en los debates mundiales sobre estos temas, en marcos como el de los Objetivos de Desarrollo Sostenible o el del enfoque «Una sola salud», debido al impacto directo que tienen en el equilibrio socioeconómico de las familias rurales y la sostenibilidad de los sistemas de producción animal,
• los Servicios Veterinarios deben estar mejor preparados para responder a estos desafíos múltiples y complejos que requieren una gama de conocimientos y capacidades más amplia que la que se suele cubrir en las escuelas de veterinaria.

Aprovechando su experiencia y el saber adquirido, y con el apoyo de su red de centros de referencia, la OIE ayudará a promover los cambios necesarios para que los Servicios Veterinarios nacionales y, de manera más amplia, los servicios de salud animal estén mejor equipados para anticipar las transiciones y responder a nuevas expectativas.

El 7.° Plan Estratégico de la OIE comparte una visión global y un marco operativo para 2021-2025

Al preparar el 7.° Plan Estratégico, consultamos a los Miembros y socios y a nuestro personal para definir las expectativas futuras. Además, llevamos a cabo un estudio entre los Miembros orientado a identificar los factores externos que tendrán una influencia en las actividades de los servicios veterinarios y en las adaptaciones que estos factores exigen. Igualmente, sacamos partido de las primeras lecciones aprendidas de la crisis de la COVID-19 que no ponen en entredicho la pertinencia de los objetivos estratégicos propuestos para los próximos años, pero que nos conducen a reexaminar la prioridad de su puesta en aplicación funcional. En efecto, es necesaria la adaptación de las actividades de la OIE a estos retos con el fin de responder a las expectativas de los Miembros, en un contexto en el que los objetivos deben mantenerse en consonancia con los recursos disponibles. Juntos, hemos preparado este 7.° Plan Estratégico con la meta de contribuir a hacer realidad algunos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y juntos asumiremos el reto de implementarlo.